Sabemos que planchar no es precisamente una de las tareas domésticas más queridas y es por eso que vamos a intentar que la labor no se te haga muy “cuesta arriba”. Gracias a los centros de planchado verás como rápidamente acabas con toda tu ropa.
Los mejores fabricantes también lo saben, de ahí que en poco tiempo, estos electrodomésticos hayan evolucionado a pasos de gigante. Al principio se trataban de grandes y pesados aparatos que daba pereza hasta ponerlos a funcionar. Sin embargo, hoy día tienen un aspecto muy parecido a las planchas tradicionales pero con todas las ventajas que aporta la tecnología.
¿Qué debemos tener en cuenta a la hora de comprar un centro de planchado?
1. Caudal de vapor
Este es uno de los aspectos fundamentales a la hora de elegir un buen centro de planchado. Se mide en gramos por minuto (g/min) y lo ideal es que la velocidad del vapor esté entre los 90 y los 150 g/min.
A más vapor, planchado más eficiente y menos tiempo y esfuerzo para obtener buenos resultados.
Los centros de planchado verticales suelen alcanzar unos 40 g/min por lo que sólo son recomendables para prendas poco arrugadas o fáciles de planchar.
Algunos modelos incluyen el golpe de vapor para arrugas difíciles. El golpe de vapor multiplica por 3 la cantidad de vapor y en centros de planchado de gran calidad puede hacer que se lleguen a los 400 g/min.
2. Presión
Se mide en bares. Cuantos más bares tenga, mayor fuerza de vapor y resultados más eficientes. Se recomienda una presión entre los 4 y 6 bares.
Tendremos la opción de utilizar el centro de planchado como plancha vertical si tiene mucha presión de vapor (para cortinas, trajes,…).
3. Potencia
Los centros de planchado tienen más potencia que una plancha tradicional.
Se mide en vatios (W), y suelen estar entre los 2000 y 3000 vatios de potencia.
Es importante que la potencia se aproveche adecuadamente por la caldera para poder generar presión. Es decir, a igual número de bares de presión, siempre es más eficiente el centro de planchado que tenga menos vatios de potencia porque se reduce el consumo energético.
4. Autonomía
Nos referimos al tiempo de planchado sin que se agote el agua del depósito.
En algunos centros de planchado es limitada y hay que esperar a que la plancha se enfríe para rellenar el depósito. En los depósitos de autonomía ilimitada, éstos están separados de la caldera y se pueden cargar en cualquier momento sin necesidad de interrumpir el planchado.
5. Capacidad del depósito
El tamaño del depósito influye en el tiempo que podemos planchar sin rellenarlo.
Cada litro equivale a 60 minutos de duración, pero hay que tener en cuenta que no todos los centros de planchado utilizan la misma cantidad de vapor.
Un depósito de 1,5 litros de capacidad, ya se considera de buen tamaño.
6. Suela de planchado

En este punto tendremos que tener en cuenta los materiales, el diseño y la distribución del vapor.
El material del que esté hecho influirá en la resistencia a golpes y ralladuras. Suelen ser de aluminio, acero y cerámica.
Si la suela es de calidad, tendrá un diseño con punta de perfil estrecho para poder planchar zonas de difícil acceso (botones, bolsillos,…) y forma curva para poder planchar con movimiento de ida y vuelta fácilmente.
La distribución del vapor viene dada por los orificios de salida del propio centro de planchado.
7. Otros
Aquí incluimos todos aquellos extras que puedan incorporar y que, sin afectar directamente al planchado en si mismo, son importantes para alargar la vida del aparato o simplemente por comodidad en la tarea.
Algunos de ellos son: sistema para eliminar la cal (algunos centros de planchado lo hacen de forma automática), seguridad (sistema de bloqueo y función de apagado automático), sistema de autolimpieza, peso y tamaño (lo ideal es que el peso separado de la plancha sea de 1 o 1,5 kilos para que no se nos carguen las muñecas).
Ahora que ya sabes cuáles son los puntos básicos en los que debes fijarte a la hora de adquirir tu centro de planchado, desde 5mejores5 te proponemos los mejores del mercado en relación calidad precio.
DIFERENCIA ENTRE CENTRO DE PLANCHADO Y PLANCHA DE VAPOR
Ahora que ya tienes claro en qué consiste un centro de planchado, las características básicas que debes tener en cuenta y las mejores ofertas en cuanto a calidad precio que encontrarás en el mercado, quizás pienses que en realidad no es lo que necesitas o que simplemente no quieres invertir tanto dinero en un aparato de este tipo.
¡No te agobies! Quizás tus necesidades se cubran con la plancha tradicional a vapor. Por eso, te detallamos de manera muy sencilla las diferencias entre uno y otro y, como siempre, te damos las 5 mejores opciones que puedes encontrar.
Lo primero que debes saber es que en la plancha a vapor este se genera en la suela de la plancha y que tiene menos presión que en un centro de planchado.
Los depósitos de agua son más pequeños y van incorporados en la misma plancha. Eso supone que deberás cargarlos con más frecuencia.
Al tener menos constancia en la salida de vapor y menos presión, son ideales para tejidos que no requieran un cuidado especial y para arrugas más fáciles.
Eso sí, son mucho más compactas que un centro de planchado y también, más económicas.