Las barbacoas de carbón son las de toda la vida. Algunas también admiten leña aunque no aconsejamos que utilices esta si no está especialmente indicado. Los materiales con los que está construida quizás no lo permitan.

 Puedes elegir entre modelos portátiles, ideales porque las puedes guardar en cualquier sitio y dejar más espacio libre en el jardín o fijas. Las tienes con tapa incorporada para cocinar piezas gruesas a fuego lento o ahumar, o sin ella.

 ¿Eres nuevo en el mundo de las barbacoas? No te preocupes. Aquí te explicamos todo lo que tienes que saber sobre las barbacoas de carbón, aunque puede que te interesen más las barbacoas de gas.

 El encendido solía ser un inconveniente; sin embargo ahora tienes a tu disposición infinidad de accesorios que te lo ponen muy fácil.

 La limpieza, una vez finalizado su uso, es clave para el mantenimiento de la barbacoa. Tienes que retirar las brasas, espera que se apaguen, y limpiar los restos de comida que quedan en la parrilla. Dependiendo de los materiales, esta tarea será más o menos laboriosa. Como resultado tendrás barbacoa para muchos años.

 Otro detalle que no debería faltar es el regulador de altura. Dado que la fuente de calor es el carbón (o en algunos casos también leña) y ésta no es uniforme, si podemos regular la distancia de los alimentos a las brasas conseguiremos un cocinado perfecto. Así mismo evitaremos sorpresas como que se nos queme la comida o al contrario, que quede poco hecha.

 Antes de entrar en los diferentes modelos, me gustaría insistir en las ruedas y en el fácil transporte. La barbacoa es algo que vas a usar puntualmente. Puede que el espacio del que dispones no sea muy grande; por ello, una vez recogida en cualquier hueco, te permitirá disfrutar del jardín en toda su extensión.